Remco Evenepoel
¿Dónde ponemos lo de Remco Evenepoel?
Lo de Remco Evenepoel ya no es que entre en los registros…
El año que nos lleva es no es un año cualquiera.
Lo que definimos como esa generación que vino a llevárselo todo, que tenía prisa, ya se lo está llevando, y crudo.
La machada de Remco Evenepoel en Donosti es de esas que muchos años después seguiremos recordando porque no será tan sencillo mejorarlo.
El año que nos lleva es un año que no entra en los cánones, que contradice teorías mínimas de maduración del ciclista, de un ciclista que en su caso va con unas prisas que producen vértigo mezcladas con la extraña sensación de querer verle en cada salida y temerle por el destrozo que pueda ocasionar.
El ciclismo de Remco Evenepoel es de todo menos causal, no es un arrebato ni un capricho, es un ciclismo consciente que hace daño, que no escatima medios en el objetivo ni tiene corseres mentales de antaño que hoy nos parecen dinosaurios.
Yo miro esta foto veo sus brazos, sus piernas, me recuerdo de su pedalada plana (talón, punta), veo su delgadez y me habla de que es un ciclista que trabaja y se sacrifica. Por eso admiro aún más su victoria, la ha cimentado antes y en cada metro de carrera pic.twitter.com/wktvwe8EeH
— Manuel Saiz Balbás (@Manolo_Saiz) August 3, 2019
Este ciclismo es precoz, voraz, atrevido pero principalmente certero y eficaz.
Es un ciclismo que no entiende de guardar, que no deja pasar trenes.
Arriesga y gana, eso que muchos no entienden.
Recuerdo gente diciendo en la previa del Tour que Egan Bernal debía aprender y guardar para mañana, el mañana eso que mueve el mundo pero que nunca sabes por dónde saldrá el sol o dará el aire.
Es un ciclismo contradictorio, se basa, como nos contaron en un conocimiento casi científico de los corredores, sus vatios, números y proyecciones, al tiempo que se corre a base de atrevimiento y arrojo, como si toda esa base científica fuera una piscina a la que tirarse sin miedo no arrepentimiento.
Hay una generación intermedia que pagará los platos rotos.
¿Cuál es la imagen ciclista de un año que va por los dos tercios consumido?
Lo de Van der Poel en Amstel, Egan en el Tour o Evenepoel en el Boulevard.
¿Dónde queda lo de este crío de 19 años?
Asusta pensar en lo que puede lograr, en lo que conseguirá amasar, pero no perdamos la cabeza, esto es largo, siempre lo decimos cuando nos dejamos llevar por la euforia del momento posterior a presenciar algo tan singular.
REBAJAS por Santa Fixie
La clave no es compararle con Eddy Merckx, aturulla el mero recuerdo del caníbal, ni pensar en que van copar, la clave es saber qué tiempo están dispuestos a apostar por este mundo que no es sencillo, que exprime y te pone al límite.
Ayer en San Sebastián, Evenepoel estaba al lado de un tipo como Greg Van Avermaet, segundo, quince años mayor, qué le pregunte las vueltas que da esto.
Eso sí, que por el camino disfrute de una senda que con 19 años sólo él ha atravesado.
Imagen: ©David Ramos/ Getty Images
Remco Evenepoel
Remco Evenepoel sigue derribando muros
Grandes, monumentos, medallas de oro… Remco Evenepoel alimenta un palmarés increíble
Cuando veía a Remco Evenepoel en el centro del podio de la crono olímpica de París, en medio de los grandullones Ganna y Van Aert, pensaba en los Juegos de Tokio, hace tres años y lo mucho que ha cambiado el panorama para el belga.
Ciclistas hay muchos, pero entre ellos, que muestren la ambición, determinación y hambre del belga no tantos.
Niño prodigio, hace cinco años por estas fechas nos hacíamos cruces por su exhibición en la Klasikoa, sin haber pasado un año de su histórico mundial juvenil en Innsbruck, remontando desde las profundidades de la carrera hasta colgarse el oro y ponerse en las miradas del mundo.
Desde entonces, el jovencito ha crecido a nuestros ojos en todos los sentidos, pero sobretodo derribando todos aquellos muros que, durante Tokio 2021, no veíamos tan fáciles para él.
Eran unos cuantos, todos han sido derribados, y lo ha logrado tras aquella horrible caída de Lombardía, hace unos cuatro años, con una recuperación nada sencilla como pudimos comprobar.
Pero Remco se ha rehecho de aquellos instantes de zozobra máxima y sí, ha marcado los hitos que definen una carrera que ya hoy podemos definir de leyenda.
Ganador de una gran vuelta
La Vuelta a España a 2022 desmontó lor grandes prejuicios sobre Remco Evenepoel y las vueltas de tres semanas, con una victoria completa y sin paliativos, firmada entre la montaña y una crono soberbia en Elche.
Ese éxito no sólo se cierne sobre la general, fue un todo, en especial la gestión de los momentos, sacando máximo partido a los picos de forma y minimizando los malos momentos, como el de La Pandera o Sierra Nevada.
El Remco Evenepoel explosivo y volcánico quedaba para las declaraciones, en la carretera se cincelaba un campeón total.
Los monumentos no son tabú
Cuando cruzó primero la meta de la Lieja-Bastogne-Lieja 2022, Remco lograba romper su historia de desamor con los monumentos, reflejada especialmente en aquella caída de Lombardía.
El belga se afanó en la clásica de casa, durísima, para firmar un éxito sin parangón ni contestación, recuperando un escenario tan icónico como La Redoute para la resolución de la decana.
Mejora en las bajadas y se maneja en la tierra
Una de las grandes carencias, comparado con otros top, del belga han sido los escenarios técnicos.
No es el mejor bajador, pero trabaja sin descanso en mejorar igual que esos tramos de sterrato que tanto le disgustan.
Comparad el Remco Evenepoel del Giro 2021 ante Egan Bernal con el de este Tour entre Pogacar y Vingegaard.
El podio del Tour es una realidad
Sin duda que sus opciones de hacer algo sonado en el Tour levantaban mucho escepticismo, hasta el punto que veía una gran ocasión para Mikel Landa.
Remco Evenepoel ha hecho un Tour inmaculado, sencillamente excepcional, con instantes para todo: desde ganarle una crono a Pogacar a gestionar las grandes cumbres, una obra completa que le ha valido un podio en su primer Tour.
Tiene todos los títulos en la vitrina
Con el oro olímpico aúna todo el serial de campeonatos en contrarreloj y no pierde la mirada sobre la ruta.
Verle en el podio de París fue cerrar el círculo y dejar por sentado que este ciclista es infinito y que cualquier predicción que hagamos sobre él corre el riesgo de ser mejorada.
El sábado, en la carrera de fondo, él ya llega con una medalla de oro en el pecho, la merma de presión que ello implica podrá jugar a su favor.
Imagen: FB de la UCI
Remco Evenepoel
Keys2024 Remco Evenepoel ante el Tour
Llegó el momento de ver a Evenepoel en el Tour de Francia
No es usual ver un debut como el de Remco Evenepoel en el Tour de Francia.
No estamos habituados a presenciar un ciclista tentar la mejor carrera del mundo unos cuantos años después de su debut en pros y tras haber ganando no pocas carreras, entre otras una Vuelta, un mundial y un par de Liejas.
Con esta peculiaridad se ha retrasado la primera participación de Remco Evenepoel en el Tour de Francia, una forma de romper el hielo tan medida y contemporizada.
Y así estamos todos, pendientes de ver al niño maravilla en la mejor carrera del mundo, en su quinta grande, tras sendos abandonos en dos Giros y dos Vueltas concluidas, una de ellas con la consabida victoria.
¿Expectativas?
Muy difícil de calibrar.
Así como con otros teníamos más claro qué podía suceder, en el caso de Remco Evenepoel, el Tour aparece como esa carrera en la que, a priori, sólo tiene cosas a ganar, pues él mismo y los suyo seguro que rebajarán el hype.
Y deberán hacerlo, porque a priori no le veo ni candidato al podio.
Digo a priori, consciente que no estamos ante un ciclista normal, ni mucho menos, estamos ante uno de los mejores que he visto nunca, sin duda, y cuyo techo nadie puede situar.
Que un día Remco opte al Tour es posible, que sea en 2024 lo veo más complicado.
En su fuero caben dos opciones.
Sacrificarse por la general, cosa que no acabo de verle, o pasar directamente a la acción si le sobreviene un mal día y buscar etapas, presencia y todas esas cosas que nos dio en la Vuelta a España y que tan buen sabor de boca nos dejó.
Remco Evenepoel
Top23 Remco Evenepoel, always welcome
Con el fiasco del Giro, el año quedó desordenadamente perfecto para Evenepoel
Remco Evenepoel, 23 años y 50 victorias en el ciclismo profesional, una estadística casi redonda que retrata a un fenómeno sobre ruedas, del ciclismo, en su faceta de anotador y klller en la carretera, pero que no proyecta la enorme presencia física y espiritual que el corredor despliega sobre este deporte.
Pogacar y Remco, destacados
Le seguirían Roglic, Kuss y Geraint
VdP y WVA son terribles en carretera pero sin esa chispa fuera de ella— JoanSeguidor (@JoanSeguidor) November 23, 2023
En un ranking de carisma, de presencia, de enormidad ciclista dentro y fuera de la carretera, creo que la lista tendría a Evenepoel siempre muy arriba.
Un peso específico que se gana en competición, pero también fuera de ella, con un carácter que abruma y destacada sobre un pelotón que en ocasiones se deja llevar mucho por lo que llamaríamos «el molde».
Remco Evenepoel sabe perfectamente que el carisma viene de serie, él lo tuvo siempre, pero que si lo mezclas con la grandeza de los números, entonces ya tienes la cuadratura del círculo.
Dijo una vez Lefevere que el trabajo que hace su pupilo belga es tan bestia, tan minucioso, que a veces hasta le da pena.
Lo dijo él, Patrick, espero que no ebrio, sobre uno de sus muchachos, él, que casi siempre es el más crítico de la clase.
Puedo imaginar el camino que Remco Evenepoel recorrió para preparar el Giro de Italia, fue tan brutal que el año que viene posiblemente no lo repita.
Por eso, cuando abandonó la carrera, la versión oficial hablar de Covid, las otras simplemente divagan, me imagino la decepción.
Evenepoel centró su año en la grande italiana y con ella en la cuneta, la temporada quedó huérfana, una temporada que ya traía toda una Lieja-Bastogne-Lieja a las espaldas.
Quizá por eso, vimos al corredor que luego vino, el ciclista que arremetió de salida contra la Vuelta a España en todos los sentidos, en el crítico con la crono inicial y la caída en la meta de Andorra y en el competitivo con tres victorias e infinitas escapadas hasta el mismo día de Madrid, condicionando a los velocistas y sus equipos en el último metro.
El Remco desencadenado es el que queremos, más allá de la solidez de una general de gran vuelta y esas cosas, que yo creo que un día sacará adelante, un ciclista indescifrable, sorprendente que sólo debes querer ver correr, por mucho que a veces no sea capaz de contener, admitámoslo, el niñato que lleva dentro.
Remco Evenepoel
Remco Evenepoel en la Vuelta: Ésta es la historia que gusta leer
La reacción de Evenepoel en la Vuelta es de las que pasan a la historia
Ayer a estas horas Remco Evenepoel veía la Vuelta a España volar de formar inapelable, a una minutada de los mejores, los tres Jumbo y cia.
Ahora, hace un ratillo, acaba de cruzar la meta de Belagua primero y solo, tras un día entero de escapada llena de rabia y calidad a partes iguales.
Acompañado en gran medida por Romain Bardet, y solo al final, Remco Evenepoel deja sello en la Vuelta que va a significar la cesión de la corona que conquistó hace un año.
Sin más noticias en el grupo de los aspirantes a la general, más allá de los ataques de Ayuso en Larrau, Remco Evenepoel ha vuelto a la escena de la Vuelta en primera persona.
Después de 24 horas que entiendo no habrán sido sencillas.
Él, que todo lo vive como si no fuera a vivir mañana, como diría Leiva, ha debido masticar con amargura el trompazo del Tourmalet, bueno mejor dicho del Aubisque, pues ya en el primer puerto importante quedó fuera de la ecuación.
Cuando Remco cayó, la Vuelta se quedó huérfana en buena medida: los Jumbo habían eliminado el principal escollo ya no sólo para ganar la Vuelta, también para copar el podio.
Desde entonces, he leído de todo, desde que las grandes vueltas no son lo suyo, pasando por su desconexión en la carrera, a que no puede con la gran montaña.
Todo eso puede o no ser cierto, el tiempo dirá, lo que es seguro es que Remco Evenepoel ha cuajado la reacción que se espera de un ciclista de época, de leyenda, de esos que quedarán en la historia como los firmantes de las grandes gestas.
Metido en la escapada del día, fue desgajando el grupo hasta quedarse solo antes de Larrau con Bardet y dar cuenta del francés en el final.
Lo dejó por pura potencia, por pura entrega y motor.
Las capacidades de Remco Evenepoel son tan grandes, tan indescifrables, que quitarle de cualquier quiniela, es una temeridad.
Su forma de ganar el día después de su gran explosión debería convencernos que este ciclista es capaz de lo que se proponga, que no se deja ir nunca, que todo lo quiere y que seguro volverá a estar en la lucha de una grande.
Y si todo lo que decimos va sobre Evenepoel es por que entre los de la general parece haberse impuesto una tregua que podríamos llamar la «Pax del Jumbo», a quien sinceramente no veo en problema alguno ya no sólo para ganar la Vuelta, también para colapsar el cajón en Madrid.
Imagen: Cxcling
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NOEL ALBERTO
4 de agosto, 2019 En 22:00
Fenómeno, para clásicas y vueltas 1 semana, si mejora con los grandes puertos que lo puede hacer, marcará toda una Época, Egan se debe afanar a ganarse otros dos Tour, y si quiere darle la pelea al Belga, tendrá que mejorar muchísimo en la Crono, siempre y cuando el belga mejore en la montaña, otro punto a favor de Egan esla inteligencia, la de Remco creo que la pasión, esperar A podagcar. Y a Higuita