Wout Van Aert
Van Aert, dime con quién pierdes y diré lo que vales
Van der Poel, Alaphilippe y Ganna han impedido el arcoíris a Wout Van Aert
Decir que Wout Van Aert estaba jodido ayer, al final del mundial de ciclocross, no hace justicia al momento, Van Aert estaba jodidísimo.
En el podio, no esbozó sonrisa alguna, mirada perdida y cara de póquer, luego vimos su imagen roto en el box, solo, con el casco puesto, pero las gafas no, seguro que soltando alguna lagrimilla de impotencia.
Es una roca de coco, pero ello no quita que le duela en el alma perder una carrera que creo que vio suya.
Mathieu Van der Poel le acaba de abrir brecha en el puja por los mundiales, un 5 a 3 que, viéndoles todos estos años, se ajusta bien a la realidad de uno y otro.
Van Aert ya sabéis lo que pienso de él, pero el nieto de Poupou es canela en rama, un killer en toda su dimensión que si ponemos negro sobre blanco ha ganado muchas veces que perdido frente a Wout cuando de ciclocross hablamos.
Al ver a Van Aert destrozado en la carpa posterior a la carrera pensé en la maldición del arcoíris que le persigue y creo que se puede prolongar.
Mirad la colección de platas que lleva desde el mundial de ciclocross de hace cuatro años y comprobad con quién se las ha tenido que ver.
Al final, rotan los rivales, pero el fijo es Wout Van Aert, como el perejil de todas las salsas, peleándose con auténticas eminencias en lo suyo, sin encajar todos los golpes.
En este tiempo, al margen de perder el oro olímpico ante Richard Carapaz, Van Aert se ha colgado la plata con Van der Poel en ciclocross, pero también con Julian Alaphilippe en ruta y Filippo Ganna en contrarreloj.
Van der Poel, Alaphilippe y Ganna al aparato…
Esos han sido los rivales de Wout Van Aert las últimas veces que estuvo merodeando el arcoiris, la cita de esos nombres marca el nivel del amigo.
Wout Van Aert está en una cantidad de batallas que es imposible salir indemne siempre.
Rara vez falla en la contienda y cuando lo hace es sonado, como en el mundial australiano que acaba ganando Remco Evenepoel.
Y es aquí donde quería ir, que Remco es otra piedra en el zapato de Wout para aspirar a recuperar el arcoíris que tiene por tres veces en ciclocross.
El actual campeón es sin duda un mal compañero para compartir los galones, con esa ambición y forma de hacer, pero tendrán que entenderse si un día les surgen todos los rivales que hicieron aguas en Australia y desmontar de una vez que la celeste belga corre fatal los campeonatos del mundo.
En todo caso, lo que en muchos casos debería ser tomado como una virtud, para Wout Van Aert es un problema, estar en misa y repicando es complicado hasta para él.
Le ha salvado, en gran medida, que sus mejores prestaciones han sido en el Tour, pero, ojo atención, porque este ciclismo ya no es de un mes ni de una carrera y a Van Aert le cabe la presión de salir a ganar siempre y eso muchas veces propicia que pierdas muchas más veces que ganes.
Imagen: FB de UCI Cyclo-cross
Wout Van Aert
Visma y Van Aert, cuando no está Van der Poel
El único antídoto real para Visma y Van Aert no ha debutado aún
De los últimos tres «Openning weekend» belga, comprendiendo las carreras de la Het Nieuwsblad y Kuurne-Bruselas, Visma, antes Jumbo, ha ganado cinco de seis triunfos, destacando en este balance rápido Wout Van Aert.
El belga ganó hace dos años la Het Nieuwsblad y éste la Kuurne, sendos éxitos que se unen a los de Tiesj Benoot, Dylan Van Baarle y el de ayer de Jan Tranik.
Es decir, que los amarillos empiecen las clásicas dominando es un clásico de serie A.
Lo que Visma despliega sobre estas clásicas es un equipo con tantas bazas que sin necesidad de que Laporte, Van Aert o Van Baarle se expresen en su plenitud, son capaces de triunfar con la cuarta o quinta opción.
La Het Nieuwsblad ha sido un monólogo amarillo.
En una carrera con múltiples escenarios, Visma nunca perdió la manija de la misma, todo lo que sucedía, todo tiro de cámara tenía un ciclista suyo.
Y en ese embudo de acontecimientos, Jan Tratnik sacó la victoria.
En la Kuurne, el destrozo a más de ochenta de meta y la distancia sideral que alcanzaron Wellens, Van Aert y Lazkano devolvió la manija al Visma.
Van Aert rodaba como Welles y Lazkano y al mismo tiempo era el más rápido de los tres, sobre el papel y en la práctica.
Visma, otrora Jumbo, haría de las clásicas su feudo, como en las grandes vueltas, si no fuera por Mathieu Van der Poel.
Con el neerlnadés en concurso, las dinámicas cambian y el ritmo de la carrera y la confianza se resienten.
¿Cambiarán las tornas en lo que ha de venir?
Imagen; @Vismaleaseabike
Wout Van Aert
No veo a Wout Van Aert fuera del Visma
No hay equipo que pueda ofrecerle a Van Aert lo que el Visma
Jaén nos dejó imágenes conocidas, entre otras el Visma en superioridad durante el momento clave de la carrera y Wout Van Aert con problemas mecánicos, pinchado y persiguiendo.
Otra vez Wout a contrapié, otra vez por detrás, una vez descartado por anticipado.
Poco o nada tenía que hacer, su rueda trasera pisó una cuña y reventó en el momento clave.
La carrera había dejado marchar a un tipo como Lazkano y la persecución se estaba fraguando, en ese instante el pinchazo le vino a Van Aert.
Situaciones que conocemos y que no siempre se resuelven como quisiéramos.
Dos Visma en punta, Jan Tratnik y Sepp Kuss, y ninguno se esperó al teórico líder incendiando así los ánimos, recordando todas las veces que Van Aert se ha sacrificado por sus compañeros y lo poco que recibe a cambio.
Yo esta vez, por eso, no lo vi asÍ, no creo que hubiera que esperar a Van Aert, no en ese momento de carrera, en el que Lazkano ha cogido una ventaja incomprensible para ser él, la caza se revoluciona y un incidente se vuelve decisivo.
Sacrificar a Kuss o Tratnik no era garantía de devolver al belga al grupo principal y habría implicado perder músculo en ese punto de la carrera.
Es cierto que Van Aert ha hecho mucho por sus compañeros, en especial Vingegaard y Roglic, pero también lo es que en su rol entra trabajar por ellos y apoyarles, igual que en otros momentos ha sido él el líder.
No es cierto que Van Aert haya perdido alguna gran clásica por no tener compañeros cerca dispuestos a ayudarle, muchas veces cuando las grandes carreras se están decidiendo casi ningún líder tiene compañeros de los que tirar.
El año pasado Jumbo no tuvo gente cerca de Van Aert ni en Flandes ni en Roubaix, sin ir más lejos.
Quizá el momento más flagrante de no ayuda que tuvo el belga fue en la etapa de San Sebastián en el Tour, cuando Vingegaard miró para otro lado.
Ahí el danés no fue inteligente, pero él sabrá.
En otro orden de cosas, a nivel de equipos, nadie puede ofrecerle a Van Aert lo que le da Visma, rodeado de auténticas estrellas, con mentalidad colectiva y los mejores medios.
Incluso este año, Van Aert tiene margen para ir a por sus carreras, sin ligaduras de estar al 110% en el Tour para ayudar al equipo.
Ahora veremos si todo lo que esperamos de él puede hacerse realidad.
Imagen: Sprint Cycling
Wout Van Aert
Keys2024 Van Aert cambia cosas
La poca presencia de Van Aert en ciclocross abre un año tan especial como clave
Siempre en el foco, personaje público en Bélgica, trascendiendo su propio deporte y actividad, el paso atrás de Wout Van Aert en la campaña de ciclocross ha dejado no pocas críticas.
Puedo entender que el aficionado medio quiere a los mejores en la mayor cantidad de carreras y estos dos, Van Aert y Van der Poel, nos habían acostumbrado muy mal con excelsas temporadas de ciclocross en meses tan alejados de la competición ciclista como diciembre y enero.
Cuando Mathieu Van der Poel acaba de sumar su décima victoria en otras tantas carreras de ciclocross, con un índice de acierto que puede ser histórico y que podía llegar a 14 de 14, mucha gente se pregunta qué pretende Wout Van Aert desapareciendo del escenario de ciclocross.
Para mí lo que estamos viendo no es otra cosa que cambiar una cosa que se ha demostrado que no funciona.
Hay que ponerse en el lugar de Van Aert, quien siendo un ciclista de época no alcanza los objetivos que su compañero de trayectoria deportiva va logrando.
Incluso con temporadas interesantes como las últimas, no tanto la de 2023, Van Aert ha querido dar una vuelta de tuerca a su suerte y en el empeño se ha llevado por delante sus objetivos en el ciclocross.
Estará, en principio, en Benidorm en un par de semanas y ahí se acabará una campaña de barro muy alejado de Mathieu.
No sé hasta qué punto el ciclocross lastra la forma de los corredores en el core de la temporada de clásicas en especial, pero Van Aert quiere comprobarlo en primera persona.
Sin embargo quedarse con su calendario de ciclocross este invierno sería superficial.
El principal cambio de Van Aert para 2024 tiene que ver con su actitud, un paso adelante que podríamos decir que es egoísta pero que no es más que estrujar el talento inmenso del corredor.
Van Aert debe pensar en sí mismo, eso hemos pensado muchas veces cuando ha caído en batalla y ahora va a hacer eso.
Esquiva el Tour de Francia y piensa en el Giro, antes las clásicas y luego Juegos Olímpicos y Vuelta a España.
Me cuesta verle en un mundial tan duro para él, pero todo lo que le viene por adelantado es brutal.
Veremos si este cambio de calendario, si este pensar más en sí mismo le resulta, lo que creo que puede ser el primer paso para tomar la iniciativa y el mando de las carreras, sin esperar que otros lo hagan por él.
Veremos si tanto cambio nos da con Van Aert en los podios que todos queremos verle.
Wout Van Aert
Van Aert, 3 cosas a cambiar
Aires nuevos, carreras inéditas y cambio de mentalidad se imponen para la mejora de Wout Van Aert
Éste es el primer año, en cuatro, que no sitúo a Wout Van Aert con los mejores de la temporada.
Ahí metí a Laporte, a Philipsen, acabo de sacar a Evenepoel, pero esta vez pasamos de largo con Wout y no con de gusto, hablamos de uno de los ciclistas más inspiradores e importantes del pelotón, el ciclista que todos soñaríamos ser, con grandes días detrás, pero al que todos le echamos de menos alguna victoria de esas que marcan.
Para Wout Van Aert no es sencillo competir.
Ha pasado de ser la rueda más vigilada, a ser superado netamente por rivales que siempre ha tenido a su alcance.
Van der Poel es el caso más obvio, pero no sólo él, Philipsen en Roubaix o el mismo Laporte en el europeo, le dejaron en puestos de plata y bronce que sin duda no hacen justicia al caché de uno de los mejores ciclistas del mundo y de los tiempos recientes.
A diferencia de otros inviernos, más previsibles y calmados para Van Aert hasta su debut en ciclocross, esta vez le leemos más en titulares y noticias sobre, principalmente, su calendario carretero.
Y anuncia cambios, el ya comentado de su debut en el Giro -aunque no lo veo disputando la general- y posiblemente la Vuelta a España.
Entre ambas grandes queda amortizado que Wout Van Aert no va a estar en el Tour de Francia, en lo que considero un premio a su persona y valor en el equipo.
Van Aert necesita romper con muchas cosas del pasado reciente, si quiere dar el paso adelante en palmarés que todos queremos para él.
Correr en carreras que no conoce puede romper esaa cadencia de segundos y terceros puestos que le cuelga del cuello.
Merece un mundial, una Roubaix… algo grande que rivalice con esa San Remo que logró en el verano de la pandemia.
El roto que le ha hecho a su calendario habitual se suma al cambio de entrenador, que espero dé en a tecla y lo tenga al 110% en las carreras objetivo.
Eso es que lo deje tan fino como cuando ha competido en los últimos Tours de Francia, la carrera más grande, la de más presión y en la que Van Aert ha corrido en plan aplastamiento como nunca lo hace en otras majors de la temporada.
Eso es lo que queremos, la actitud del Tour 21, 22 y 23 exportada a la primavera, al mundial, a los Juegos Olímpicos.
Correr anticipándose, sin miedo, sin carga psicológica ni mirada a la retaguardia.
Porque si Van Aert es capaz de ganar en el Ventoux, una crono y un sprint de Campos Elíseos, ante los mejores en su prime, me niego a creer que no se capaz de tomar la Roubaix por los cuernos y hacerla suya, más cuando está rodeado por un equipazo.
El cambio de actitud es necesario, imperativo y con él lo otro, entrenador nuevo y carreras que no conozca y en las que no se deba a nadie.
Espero sea la mejor alquimia para que Wout esté donde merece estar ese motorazo.
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