Remco Evenepoel
Remco Evenepoel atrasa el reloj dos años en Valencia
Publicado
6 meses atrásen
Por
Iban Vega

Es complicado pensar que Evenepoel no haya sentenciado Valencia
Mil circunstancias después, una pandemia por medio, una caída brutal y posterior recuperación, Remco Evenepoel lo retoma en Valencia donde lo dejó hace dos años, con un estado de forma tremendo y toda la campaña por delante.
No, no somos los mejores fans del belga, pero hay cosas que resultan aplastantes, y una de ellas es que este chaval es imbatible en su terreno.
Todos hicieron su trabajo, todos pusieron un poco de lo suyo, pero al final, cuando la carrera entró en zona roja, Remco Evenepoel le ha dado a la Volta a Valencia un golpe de tal magnitud que mucho me temo le sitúa como el gran favorito para ganar la general y lo decimos tras la primera etapa.
«23 victorias y no es velocista«, como dice Javier Ares en Eurosport, hablan de un anotador supremo que en llegadas como la inaugural de esta Volta a Valencia no tiene más que abrir gas para recordarle a todos que, si no están por ponerle las cosas complicadas desde lejos, no hay quién pueda toserle.
Y no eran unos tuercebotas los que estaban ahí.
Bahrain ha venido con su bloque de gala, tirando con Tratnik y Pello hacia arriba, Movistar lleva a su pareja ganadora Mas-Valverde, hasta Ineos puso delante a Carlos Rodríguez, qué delicia verle ahí delante.
El chaval de Almuñécar, presente la semana pasada en el accidente de Egan Bernal, es un encanto en todos los sentidos.
Pero Evenepoel ahora mismo es otra cosa, un ciclista que en este terreno se sabe imbatible, que corre en otra liga.
El belga es un año más viejo que Carlos Rodríguez en edad, pero alguno más en experiencia.
Sin la penosa recuperación que le tuvo parado hasta el pasado Giro, con la experiencia de haber pasado por los malos momentos de este deporte, con sus buenas polémicas a las espaldas y con la confianza que transmite, este chaval pinta a tirano en este inicio de temporada.
Sin embargo él sabe, lo sabemos todos, que le esperamos en las grandes citas, en las World Tour, con todos los respetos para Valencia, será en Itzulia, en Tirreno, en las Árdenas… donde Evenepoel tenga su reválida final.
Por cierto, que el casillero del Quick Step ya marca la primera victoria.
Te puede interesar
Remco Evenepoel
Remco Evenepoel: Cada uno puede ser una leyenda en lo que quiera
Publicado
2 semanas atrásen
31 de julio, 2022Por
Iban Vega

Ahora mismo Remco se mira en el espejo de los Cancellara y Boonen
El palazo que ayer dio Remco Evenepoel en San Sebastíán, ya sabía, iba a traer cola en un debate que, de aquí a la Vuelta, no parará de crecer.
¿Debe Remco jugarse los cuartos a una gran vuelta?
De primeras opino que no, pero claro, cuando uno es tan joven, cuando lleva tan poco en el negocio, aunque parezca que lleve una vida, es muy atrevido decir esto.
Remco Evenepoel es a día de hoy un cheque en blanco, no le veo para grandes vueltas, ahora mismo, pero sigue siendo muy joven y ese motoraco puede virar cualquier día a las tres semanas.
No sería la primera vez que lo hemos visto, surgen como corredores de un día y llega un momento que pegan el cambio y pueden con las 21 etapas.
En la historia hay casos, recuerdo, de primeras el de Tony Rominger o incluso el más reciente de Primoz Roglic
Ambos ganador tres Vueltas a España del tirón con el estigma, en la primera de ellas, que seguro iban a tener un día malo que iba a llevarse por delante todo el trabajo.
Pero no.
En la Vuelta 92 Rominger dio el «estirón» en las 21 etapas como Roglic lo hizo en la de 2019, meses después de venirse abajo en la tercera semana del Giro.
Remco puede dar ese paso, sin duda, y evidentemente que tiene todo el derecho de querer buscar ese salto.
Lo que le sucedió en el Giro del año pasado estuvo muy condicionado por toda la lesión que arrastraba.
Ahora parece que en la Vuelta viene limpio para entrar a saco.
Otra cosa es que nos guste verle hacer lo que hizo en Donostia ayer.
Un ejercicio de superioridad tan plástico y elegante que nos deja el mejor sabor de boca, al punto de desear que no se dedique a las tres semanas.
Es como si comparamos los adornos y artificio del Tour de Vingegaard y Van Aert, el primero atacó la general con movimientos precisos y casi quirúrgicos para cargarse el favoritismo de Pogacar, el otro se dedicó a correr para sí, para el equipo y para el público, firmando una de las actuaciones más excelentes jamás vista.
Sí que es cierto que, cuando hablas con cualquier ciclista medio consagrado con un palmarés curioso y algunas cosas ya hechas, casi todos admiten que su intención es ver dónde pueden estar en una gran vuelta.
Es una constante.
Para mí, por eso, una leyenda ciclista se consagra haciendo cosas como las de Remco en San Sebastián, dejando momentos únicos, y no siempre tiene que ser ganando una gran vuelta.
La verdaderas leyendas del ciclismo ganaron grandes vueltas y monumentos. Y a eso aspira Remco creo yo. Su espejo es Pogacar. No hay otra. Que puede acabar siendo un gran clasicomano pero no ganando GV? Pues no habrá sido todo lo que prometía. Debe intentarlo al menos.
— Bødieč (@Bodie__B) July 30, 2022
La historia está llena de ganadores de grandes vueltas grises y tristes, pero de gente como Cancellara y Boonen que escribieron leyenda grande desde las clásicas y otros terrenos.
Remco ahora está en este apartado, con dos Klasikoas y una Lieja, veremos dónde le da su apuesta por las grandes vueltas.
Imagen: FB Donostiako Klasikoa
Remco Evenepoel
Hay mucho de bueno en Remco Evenepoel
Publicado
2 meses atrásen
19 de junio, 2022Por
Iban Vega

Es muy pronto para decir que Evenepoel no va a ganar una grande
Remco Evenepoel entra y sale de la actualidad al ritmo que compite o no.
Vamos camino de los tres años de aquel tortazo que le dio al ciclismo en Donosti y la vida del pequeño Remco ha sido una montaña rusa de sensaciones y opiniones, no siempre de la mano, no siempre alineadas, pero sí al unísono.
Desde entonces, a Remco le hemos visto de «nuevo Merckx» a otro buen ciclista, pasando por todos los escalones de cariño y apuestas posibles.
En todo caso, una cosa es cierta, como dice Alix, lo que hizo Remco en San Sebastián, un joven, tan joven, a esa edad, ganar a esa gente y ese nivel de carrera, sólo lo hizo Remco.
Cada carrera en la que Evenepoel toma parte es una lotería de pronósticos y opiniones que no deja indiferencia.
A mí personalmente, nunca me han gustado esos modos altaneros, quizá por clásico, por pensar que las cosas tiene una forma de hacerse y hay jerarquías.
Sin embargo, ello no quita, que no admita que es un ciclista especial, incluso cuando no gana vueltas por etapas.
Porque es la pregunta del millón que surge y vuelve a las pantallas cada vez que el belga se inscribe en una carrera.
¿Es Remco Evenepoel un ciclista de vueltas por etapas?
Yo creo que si no lo es, podrá serlo, a veces se nos olvida que sigue siendo un crío y que su tiempo en este deporte no es excesivo.
Es decir, margen tiene, todo el que él y los que le rodean quieran darse.
A la vista está que una vuelta World Tour no es una de las que ya tiene en el palmarés.
Cierto es que ganó Polonia por aplastamiento en 2020, pero desde entonces encadena sonoras derrotas en cada WT en la que se implica: desde Tirreno, en la que quiso jugar de tú a tú a Pogacar, a Suiza, pasando por Itzulia.
Una de las dudas que tuvimos los días de miel y laurel para Remco residía en saber cómo se tomaría las derrotas.
Este año le están viniendo unas cuantas, y el tío, sí, las va encajando con un estoicismo que no le saca de las quinielas.
Las etapas de cierta dureza se le hacen bola, pierde opciones de la general pero acto seguido demuestra poder de reacción, como la fantástica etapa que se casca en Arrate, que posiblemente no fuera la mejor planteada tácticamente, pero le valió el halago del personal.
Y a los pocos días fue rey de Lieja.
En Suiza, no estuvo delante en las etapas duras, incluso con la criba del Covid, no ha sido ni top ten, pero se ha llevado una crono a la «buchaca» que engorda un palmarés que va tomando piezas desde la Volta a Valencia.
Evenepoel no ha ganado Suiza, como ganó Noruega, ni Tirreno, como hizo en Valencia, pero sigue haciendo cosas interesantes, es un ciclista que apetece ver y quiere seguir creciendo.
Porque sigue habiendo material bueno en esas piernas y porque aún puede progresar, yo no diría muy alto que Evenepoel no va a ganar una gran vuelta o incluso otra del World Tour, sigue siendo un libro en blanco, y sorpresas, el ciclista que algunos dicen ver gordito, seguro que alguna nos depara.
Remco Evenepoel
Al ciclismo le interesa un Remco motivado
Publicado
4 meses atrásen
26 de abril, 2022Por
Iban Vega

La mejor versión de Remco Evenepoel es bien para el ciclismo
Todos situaríamos a Remco Evenepoel entre las maravillas que el ciclismo actual nos está descubriendo.
Sí, lo sabemos, hemos sido ácidos con él, le hemos atizado bien por sacarse el polvillo del hombro en una celebración, por su altanería en las declaraciones, por una soberbia fuera de toda duda y a veces ilógica.
Pero este niñato, es nuestro niñato, y cuando Remco se pone manos a la obra es bueno para el ciclismo y por ende para quienes amamos este deporte.
No sabemos cuál será su palmarés cuando cuelgue la bici -me da que éste no dura muchos años-, no creo que gane los cinco monumentos, lo de las grandes vueltas está por ver, sí sé que no será el nuevo Merckx… aunque ¿presidente?
The people have spoken: Remco president! #LBL pic.twitter.com/PQiIz5TYQu
— Mihai Simion (@faustocoppi60) April 25, 2022
En todo caso, Remco Evenepoel es un lujo, algo que cabría inventar si no lo tuviéramos aquí
Su trayectoria meteórica, truncada esa tarde en el descenso de Sormano, le ha puesto pruebas ya duras en el camino.
Cuando explotó tan joven, que si Klasikoa, que si Algarve y Burgos, que si Polonia…, preguntamos cómo gestionaría los malos momentos, pues si algo acostumbra a cumplir el ciclismo es ese dicho que no todo el monte es orégano.
Me pasa el amigo Albert Rivera el enlace de la entrevista de Remco Evenepoel tras ganar la Lieja-Bastogne-Lieja en la que admite malos momentos en la recuperación de la caída de Lombardía.
Llegó a reconocer ganas de llorar sin más, una sensación que me resulta familiar y que explica uno de los males más comunes de nuestro tiempo, la depresión, una especie de radioactividad que pudre todo lo que toca, sin importar dónde vidas o a qué te dediques.
Remco, desde muy joven, futbolista primero, ciclista ahora, se acostumbró a ganar, a tocar pelo con facilidad, pero la vida no se lo pone sencillo a nadie.
Y cuando vinculas tu felicidad a los resultados, corres ese riesgo.
En todo caso, en Itzulia advertimos que nos gustaba lo que veíamos en Remco Evenepoel, que nos gustaba ese ciclismo de hormiguita, de dar siempre la cara, de no perder el norte de una carrera que le puso al límite.
Perdió hasta el podio, pero alabamos su actitud y su trabajo, remar y remar, incluso cuando nada invitaba a que podía ganar.
También nos gustó su pluriactividad en la Flecha Brabanzona, dejando de lado los toques a compañeros y continuos aspavientos, todo eso forma parte del personaje que se ha construido.
Por eso, cuando ganó de forma abrumadora la Lieja, cuando se sacó a relucir la mejor versión de Remco, el ciclismo no puede menos que felicitarse y saborear las paladas de un ciclista que ha venido para dar qué hablar.
Y eso es bueno, eso nos interesa a todos…
Imagen: A.S.O./Gautier Demouveaux
Remco Evenepoel
Remco Evenepoel se hace mayor en Lieja
Publicado
4 meses atrásen
24 de abril, 2022Por
Iban Vega

La brutal victoria de Evenepoel en Lieja sí que es un salto adelante
Lo que Remco Evenepoel ha firmado en Lieja son palabras mayores, un paso adelante sin solución, entrar en un estadio del que era ajeno, logrando una victoria de esas que sólo se pueden calificar de históricas.
Aunque como en todo buen relato aquí hay una presentación, nudo y desenlace.
Porque la previa de esta Lieja-Bastogne-Lieja no había resultado sencilla para Remco y su equipo.
Empezando por lo segundo, a nadie se le escapaba la desastrosa primavera de los chicos de Patrick Lefevere, no sólo ajenos al triunfo, también fuera de los grandes podios.
Para Evenepoel, la carrera que empezaba y llegaba a Lieja se significaba como una reválida en una campaña con tantas subidas y bajadas, entradas y salidas de escena, que sólo una mente joven e inquieta como la suya, era capaz de gestionar.
Tras la lucha hasta el día final en la Itzulia, el Remco en «modo clásica» se activó en una surrealista Flecha Brabanzona, en la que quiso tomar todos los tiros de cámara, los buenos y los malos, los que le describían como un ciclista único y al mismo tiempo, como un tipo altanero e incluso hasta soberbio con el resto del pelotón.
Pero todo eso fue pasado, un camino que rompió en la decana para dejar huella en la historia.
El ataque que propició en La Redoute es leyenda del más viejo de los monumentos ciclistas
Salvada la horrible caída que acabó, entre otros, con su compi Alaphilippe, Remco hizo un solo ataque, el bueno, el definitivo.
Saltó delante de todos, saltó y abrió hueco con una contundencia tal, que todo lo que vino detrás nos dejó con ganas de aplaudir hasta quedar sin manos, una trepada monumental, digna del triunfo que iba camino de conseguir, sin mirar atrás, sin concesiones, haciendo bueno todo esto que contaban de él.
Porque la Lieja-Bastogne-Lieja no es una semiclásica, con todos los respetos, es una carrera que te mete directo y por la puerta grande en lo mejor de la historia de este deporte, es suceder entre otros a los dos eslovenos, Roglic y Pogacar y es, de paso, dejar atrás el mal rendimiento que siempre emergía en Remco cuando disputaba una World Tour.
Aquí dio el golpe delante de los Bahrain, delante de Mas y Valverde, de los Ineos, de los Bora con Higuita y Vlasov, de todos y cada uno de los favoritos que seguían en concurso, en una actuación que sí, ahora sí, está al nivel de las expectativas que había generado.
Una victoria que entronca directamente con el Remco anterior a la caída de Lombardía, la del ciclista de San Sebastián o Polonia, las mejores pruebas en las que había dejado el sello.
Al margen de su altanería y soberbia, al margen de las niñatadas, Remco ha dado qué hablar por su forma de competir y admirable capacidad para rematar.
Y lo logra, tras probar todos los sabores del ciclismo, tras el dolor de una caída y su recuperación, tras sortear las criticas de los aficionados y la presión de los patrocinadores, tras, en definitiva, crecer y pasar por todos los estadios de un deporte que si una cosa tiene es que es largo y eterno, tanto, que tienes tiempo para pasar por todos los escenarios.
Hoy todos hablan del triunfo de un joven de 22 años en un podio complemente belga, ya nadie recuerda Merckx, ni le compara, porque Remco escribe su historia en primera persona, sin esperar referencias.
Bravo Remco, bien Evenepoel, esta vez sí, diste que hablar sólo por lo deportivo, ganar en Lieja y hacerlo así está al nivel de muy poquitos.
Imagen: A.S.O. / G.Demouveaux


Sandra Alonso, Jack Haig y los secretos de la GF Encamp Pas de la Casa


Juan Ayuso en la Vuelta: lo mismo que con Carlos Rodríguez


La suerte de los campeones es una herencia reservada a unos pocos


El amarillo no es un color cualquiera en el ciclismo


La Vuelta debe vender el modelo «Utrech»


Javier Guillén, los motivos para la seguir las «Vueltas» masculina y femenina



El Tour de 1983, por Ángel Arroyo


Tour Femmes para curiosos


Tour 2022 para inquietos – vol II


¿Habría sitio en este ciclismo para un corredor como Eduardo Chozas?


Iván García Cortina debería dejar Movistar cuanto antes


La caída de la Vuelta a Burgos viene por un error garrafal


El pésimo año de Miguel Ángel López y Astana


Eusebio Unzué sigue sin ver la realidad de su Movistar



El Tour de 1983, por Ángel Arroyo
Egan Bernal ya está de vuelta, Dinamarca le espera.
Como si quisiera rendir visita al vigente ganador del Tour para volver a la casilla de salida
This is insane!💪🏻🔥 https://twitter.com/inrng/status/1558884510011473921
Lo + leído
- Ciclistas2 semanas atrás
Iván García Cortina debería dejar Movistar cuanto antes
- Opinión ciclista2 semanas atrás
La caída de la Vuelta a Burgos viene por un error garrafal
- Miguel Ángel López2 semanas atrás
El pésimo año de Miguel Ángel López y Astana
- Ciclismo3 semanas atrás
Eusebio Unzué sigue sin ver la realidad de su Movistar
- Ciclismo antiguo2 semanas atrás
El Tour de 1983, por Ángel Arroyo
- Ciclistas1 semana atrás
El Sosa de Movistar se queda muy lejos de lo esperado
- Ciclistas5 días atrás
Carlos Rodríguez va a la Vuelta pendiente de otros
- Ciclismo antiguo5 días atrás
Pocos ciclistas impactaron como Jan Ullrich