Ciclistas
Un Almeida & Ayuso «versión ciclista»
Por mucho que queramos ahora mismo Ayuso no tiene los galones de Almeida
Mirad la segunda línea del UAE Team Emirates, la que va detrás de Tadej Pogacar, y decidme qué veis: Joao Almeida, Marc Soler, Mark Hirschi, Rafal Majka y… por presión popular, Juan Ayuso.
Lo que yo veo es un bloque, y no los hemos citado todos, tan potente, que cada carrera en la que concurra sin Pogacar va a suponer una cuita interna de méritos y galones.
Y no puede ser de otra manera, porque hablamos de profesionales, personajes que saben que en su rendimiento y lo que muestren en carretera les va el futuro y el pan de la familia.
Viene todo esto a cuento por el rarísimo desenlace de la etapa reina de esta Volta a Catalunya, y digo raro porque ahí vimos todo tipo de acciones muy complicado de interpretar en clave de equipo si nos atenemos a lo que hicieron Ineos -con Carlos Rodríguez y Carapaz jugando sus cartas al mismo tiempo- y el citado UAE, en el que varios ciclistas tuvieron su momento.
Antes del tema entre Ayuso y Almeida, Marc Soler buscó la escapada desde lejos, sin suerte, y George Bennett probó ya en Boi.
Luego vino una situación que, aquí en España, muchos arrimaron a su argumento: Almeida está trabajando para Ayuso.
Leyendo lo que el luso dice después de le etapa, él se declara encantado con la victoria, habla de un ritmo creciente hasta el sprint final y punto.
En ningún momento Almeida cita a Ayuso en su declaración, ni que trabajara para nadie, por mucho que nos parezca que el portugués pudo haberse guardado algo para el final y no batir a Nairo e Higuita al sprint.
Pues me voy a comer mis palabras cuando dije que no veia a Almeida para el Giro. Este ciclista no para de crecer #VoltaCatalunya101
— JoanSeguidor (@JoanSeguidor) March 24, 2022
Recuerdo aquella famosa etapa de la Vuelta en la que Valverde tiró de todos en Cumbres Verdes con la vista en Nairo y acabó ganando la etapa.
Yo creo que Almeida está llegando a un nivel de forma y madurez que él hizo la selección -controlando esfuerzos, dijo- y luego tuvo suficiente para irse con los colombianos y rematarles en meta.
¿Estaba corriendo para Ayuso?
El entonces mejor joven de la carrera dijo en meta que llegó fuera de punto al final, es decir, el ritmo de su compañero había sido suficiente para llevarle por encima del umbral.
Con lo cual, yo lo que vi es que cada uno fue a acumular méritos en una carrera en la que no competía el gran e indiscutible jefe, Pogacar.
Almeida ya tuvo arrestos para encajar las indirectas directas de Evenepoel en el Giro, estaban en un equipo belga, recordad, y poco le puede pasar en UAE si encima demuestra un estado de forma que no para de crecer.
En todo caso, la euforia con Juan Ayuso convendría contenerla, hablamos de un ciclista de 19 años que está entre los mejores en una carrera del máximo nivel, su irrupción es tremenda, pero no olvidemos que, negro sobre blanco, el español no puede tener los galones del portugués.
Joao Almeida me parece el segundo del barco de UAE, un ciclista que sólo deberá reportar a Tadej y que, ahora mismo, considero favorito top 3 en el Giro.
Ese percal no lo maneja, aún, Juan Ayuso.
Imagen: @VoltaCatalunya
Ciclistas
Filippo Ganna se quita los asteriscos
El salto de Filippo Ganna en San Remo debe ser un punto de inflexión
Es curioso el caso de Filipo Ganna, no sé si hay gente que le tiene ojeriza o que no se acaba de creer que estamos ante un corredor que, como vimos el sábado camino de San Remo, come en la mesa de los más grandes.
El italiano es uno de los mejores ciclistas de la actualidad, un tipo corpulento, compacto, grandísimo rodador y contrarrelojista excelso, al que sin embargo se le cuestionan los méritos, como creyendo que no va a salir de su zona de confort, eso es, el velódromo y cronos por debajo de los 20 kilómetros.
Pero nada más lejos de la realidad.
Si miramos estos últimos años, Filipo Ganna ha sido un ciclista capaz de evolucionar y mejorar en todos los campos, incluso con su obvia limitación del peso.
Ha llegado más allá de lo que muchos pensaba y lo habrá hecho con un trabajo que podemos intuir.
Filippo Ganna no sólo rueda como los ángeles, ni sólo se cuelga oros olímpicos en el velódromo, ni acumula récords de la hora,.. él ya nos demostró en el Giro de la pandemia que era capaz de sortear dificultades montañosas y acabar muy delante e incluso ganar alguna etapa
El año pasado tuvo un rol interesante en la París-Roubaix y ahora esto de San Remo.
Lo del sábado no lo vi venir.
Se acopló a la estela de Pogacar en el Poggio y acabó segundo batiendo al sprint a Van Aert y al propio esloveno.
Fue la cadena, en engarce para que Van Aert y Van der Poel no perdieran el tren de Pogacar en el primer ataque.
Sólo un pero, el descenso, en el que no le vimos como podíamos presumir, en algún viraje se le vieron las costuras.
Sin embargo ahí sigue Filippo Ganna, que no es solo una pose bonita o un matador contra el reloj, es un ciclista cada vez más completo, que cultiva habilidades y cuestiona aquellos que le veían limitado.
Una vez dije que él come de la mesa de los grandes, esto lo ratifica, aunque espero que el piamontés esté más presente durante más veces durante el año y no nos deje huérfanos de esa calidad «casi pornográfica» durante tantos periodos.
Imagen: FB INEOS Grenadiers
Primoz Roglic
Roglic & Evenepoel, el Giro de Catalunya
El duelo Roglic & Evenepoel es el anticipo del Giro de Italia
La cosas de la vida, la Volta 2023, que con tanto detalle os hemos descrito, se supone este año un anticipo del Giro con Primoz Roglic y Remco Evenepoel en la salida.
A unas seis semanas de la primera grande, y en medio del subidón de la primavera, nos vemos con un entremés de mayo en pleno marzo en una carrera que, por otro lado, ofrece un diseño muy mejorable.
Pero están aquí, con cuentas pendientes y sabedores que los focos van a estar en ellos.
La última vez que Roglic y Evenepoel me midieron fue en septiembre, en el drama que le tocó vivir a Roglic en aquella llegada en llano en la que estaba ejecutando un ataque de esos que duelen, pues no se esperan, pero reporta un golpe moral y unos segundillos.
Roglic acabó por los suelos, destrozado -cuántas quemazones le hemos visto ya- y la sensación que su duelo con Evenepoel dejó hojas en blanco.
Medio año después, vuelven a cruzarse en la Volta, como grandes favoritos en un listado con nombres interesantes -ojalá veamos a un Bernal de regreso- pero ninguno a su nivel.
Sobre esta semana que empieza, creo que el reto para Evenepoel es cojonudo.
Corre un tipo de carrera que sin venirle mal, tampoco es su terreno idóneo, le quitan las cronos, como en casi todos los sitios, y le encadenan a tres llegadas en alto, ante un rival directo en unas semanas.
Ya sabemos que viene de dar grandes números en Tenerife, pero las sensaciones que ofrece el campeón del mundo en carrera son de debilidad cuando le ponen en aprietos para arriba.
Lo vimos en el UAE Tour con Adam Yates, cuando el británico le dejó en el tramo final.
Cierto es que Evenepoel gestionó bien la renta, pero Roglic y otros saben que el belga que resulta tan intratable en ciertos terrenos, ofrece debilidades en las llegadas en alto.
No sé hasta qué punto Roglic vendrá a disputar la general.
Tras hacerse con la de la Tirreno transmitiendo la sensación de que pasaba por ahí, ahora tiene opción de sumarle una Volta a su listado de vueltas por etapas que reluce en su estantería.
Ojo que el amigo viene con Dauphiné, París-Niza, Tirreno, Itzulia y Romandía, en una colección que no muchos han juntado estos años, de Valverde a Froome, pasando por Nairo, Richie Porte y el mismo Pogacar.
La Volta en este caso vendría a engrosar el caché, pero especialmente daría señas de lo que puede pasar en el Giro, ahí donde Roglic y Evenepoel se han citado para seguir lo que dejaron pendiente en la Vuelta.
Tadej Pogacar
Pogacar corre para la Milán-San Remo del futuro
Cada edición que pasa, Pogacar está más cerca de la Milán-San Remo
Claro que decir que Pogacar está cerca de ganar la Milán-San Remo con el paso de los años no significa que un día vaya a ganarla, pero como decían en mis tiempos de escuela: progresa adecuadamente.
En dos veces que el esloveno ha estado aquí ha sido factor determinante en el desarrollo de la carrera, e incluso esta vez ha rozado el podio.
Cuando hace una semana finalizó una París-Niza «canibalesca», pensamos con nitidez en Tadej Pogacar como la rueda a vigilar en esta Milán-San Remo.
En este proceso, cupieron los sueños más lúbricos, hasta que era posible un ataque ganador desde la Cipressa.
Pero como el propio corredor admite, ésta es una carrera complicada no, lo siguiente, una suerte de ruleta en la que él nada en medio de ciclistas más experimentados y en un terreno extraño para él, carente de la dureza que necesita para ganar.
Ahí reside, por eso el encanto del reto, compitiendo por ganar la Milán-San Remo, Pogacar está completamente fuera de su zona de confort.
Pero ello no le amedrenta, este tipo es «Juan sin miedo», como digo de otros, tipo Pidcock, que lo compiten todo como si nada les importara o condicionara.
Al igual que el año pasado, hemos visto que a Pogacar le falta la receta para la Milán-San Remo.
Hace 365 días estuvo en la pomada, su equipo hizo la selección desde la Cipressa al extremo que se quedó casi sin efectivos en el Poggio.
Luego vinieron Mohoric y su descenso del Pogggio
En esta edición Pogacar y UAE optaron por otra estrategia, tener más gente en el Poggio, propiciar que Wellens le lanzara y a jugarse la fuerte.
No hubo tanta dureza, y Van der Poel tuvo lo suficiente para darle réplica y dejarle atrás… en sus mismas narices.
Pero el proceso sigue, Pogacar prosigue su conocimiento de la carrera, sus matices, los puntos, las referencias y creo que poco a poco está más cerca de domarla un día.
Por eso no le descartéis para el futuro, esta esponja sobre bicicleta corre para ganarla en próximas ediciones, sabemos que será determinante, otra cosa es que acabe de ganador, pero su obsesión de ganar todo lo gordo una vez en la vida le devolverá a este escenario en el futuro.
Imagen: FB Milano Sanremo
Wout Van Aert
Van Aert es el perdedor de esta Milán-San Remo
Para Van Aert esta Milán-San Remo ha sido otro monumento que ha visto pasar
Balance final de la Milán-San Remo y ya me perdonaréis no hablar más del carrerón de Filippo Ganna, pero es que la suerte y resultado de Wout Van Aert merecen un foco especial.
Siendo directo, y respondiendo a la pregunta inicial sí, creo que Wout Van Aert es el gran perdedor de esta Milán-San Remo.
Lo digo con tristeza, os lo podéis imaginar, pues el belga ahora mismo es mi ciclista favorito, la «niña de mis ojos», al punto de desear verle en lo más alto del cajón de cada una de estas citas, pero no sé qué cojones le pasa en estas carreras que siempre acaba un peldaño por debajo de los mejores.
El Van Aert del Tour es eso, un rodillo que domina no a placer, pero sí con contundencia cada paso de la carrera, un ciclista desinhibido que rompe y rasga, tiene iniciativa y lleva al resto a remolque.
El Van Aert de carreras com esta Milán-San Remo es otra cosa, un ciclista que encaja golpes, pero que rara vez los propina, como si un techo de cristal emergiera sobre su cabeza ante el archirival Van der Poel, quien en los mano a mano, ya lo veis, es netamente superior.
Quiero pensar, a la vista del Poggio, que a Wout Van Aert le falta un hervor para su mejor punto de forma, al fin y al cabo la Milán-San Remo ya estaba en su casillero, pero las sensaciones fueron familiares, un ciclista top que las vio venir, sin tomar la iniciativa en ningún momento, saliendo a los cortes, corriendo a remolque y, en el momento clave, siendo el objetivo de todas las miradas y vigilancias.
Para Van Aert pasan los años y el casillero de monumentos sigue donde estaba, seguro que en Flandes y Roubaix será protagonista, pero lo será en la medida que esperamos de él.
Nos dijo Saúl Miguel, comentarista de Eurosport, en el podcast que de Van Aert esperaba una Roubaix por aplastamiento, aunque sólo fuera por sacar todo eso que le vemos le cuesta tanto sacar a relucir.
Ojalá, lo digo, ojalá lo veamos, pero no debe ser sencillo gestionar estos momentos y esta época en Bélgica, Van Aert es ahora mismo un top al que le falta la corona de verdad, y todos sabemos que ésta está en esas carreras para las que le vemos como destacado aspirante, incluso en un equipo como el suyo, que tiene otros que perfectamente pueden optar a lo que él quiere.
En breves, Flandes y todo lo que ello conlleva, espero que Wout no falle a la cita con la historia.
Imagen: FB Milano Sanremo
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Masai
4 de mayo, 2022 En 1:28
Los galones no existen, el que mejor corta cojones siempre acaba de capador. ON VERRA.
Ah y no mientas!.. .que tu no quieres.. eso que dices en el títular… que ya se te vió el plumero hace mucho tiempo. Todavía se recuerda como no pudiste disimular tu alegría cuando el chaval se pegó la ostia en el Tour del Porvenir..porque lo tiraron.. y hablabas de baño de realidad y no sé cuantos disparates mas.. como si Ayuso hubiera perdido la carrera por no poder con los rivales. NO engañas a nadie, tu antiespañolismo de charnego acomplejado no tiene cura. Sigue vertiendo odio.
Chau salau (aunque gracia como cronista tienes entre muy poca y el cero absoluto)
Iban Vega
4 de mayo, 2022 En 8:46
amigo, ciertos cambios en los planes de educación hicieron estragos en ti. Lo siento