Eso del #Quedateentuputacasa, hoy en día no es tan complicado
La realidad que nos espera en dos semanas, para abrir boca, ya la tenemos aquí y el #Quedateentuputacasa, que suena peor, y más contundente, suena de tweet en tweet, de feed en feed…
Un grito que nos confina en casa por que el mundo nos ha puesto frente al espejo de una vulnerabilidad de la que nadie escapa.
El ciclismo, los ciclistas, tampoco.
Por eso no entendemos que sucedan cosas como éstas…
Durante mucho tiempo, el colectivo ciclista se ha arrogado una superioridad moral que no sólo debe ser de boquilla, también de acción.
Salir en bicicleta estos días de #Quedateentuputacasa es un acto irresponsable en dos sentidos.
Es un pésimo ejemplo para ese colectivo que no contamina, no ocupa y es saludable, como tanto se proclama.
Pero es que si se sufre un percance, un accidente, si uno se abre la cabeza, o se parte la pierna puede darse por jodido en un sistema sanitario que está al límite.
Se pone en peligro y pone en peligro a otros, obliga al médico, enfermero y auxiliar de turno a priorizar entre un imbécil que no sabe estar quince días sin bicicleta y un enfermo con graves problemas respiratorios.
Es crudo, pero es real, no los están diciendo las autoridades, las fuerzas de seguridad, los exhaustos profesionales de la sanidad, el escenario ha cambiado, el juego de siempre no vale, hay que pasar el trago y #Quédateentuputacasa.
Y no será que no tenemos alternativas.
En el mundo de multiconectividad tenemos variables para todos los gustos, variables ciclistas para mente y cuerpo.
Youtube es una mina de vídeos, jornadas míticas, momentos que nos marcaron y recordamos, y que seguro nos animará rememorar, aquella crono, aquella jornada en el Tour, aquel Flandes…
No es tan complicado revivir aquello, y en estos momentos seguro que gratificante.
Y qué decir de una oferta de contenidos sin igual, los amigos de Ciclismo en Ruta nos ponen sus «Afiladores» en la pantalla con gente de pluma diversa y mente abierta para amenizarnos tardes de buen e inédito ciclismo.
O la globerada de nuestro amigo Jordi Escrihuela, que hace virtud del ciclismo más simple y nos pone ante la realidad que nunca deberíamos olvidar: hasta el más pro es un jodido globero.
Pero no sólo, tenemos ciclistas como Iñigo Elósegui que se suma al recuerdo y los recortes para hacer más llevadero esto…
No es tan complicado subirse al tren, o si no el tuiterío ciclista, una panda de maravillosos tarados que seguro nos podrá a bajar de un burro en alguna ocasión, pero que nos hará partinos de risa sacando punta a cualquier gilipollez.
O cualquier historia…
Y para los que nos gusta estar activos, bicicleta estática, algo que muchos tienen, y una buena serie o seguir a Cancellara en el Roubaix aquel del «motorcillo», meterse un Bkool o un Zwift o en su defecto, seguir a los muchos entrenadores y plataformas que seguro que os da un «plan de supervivencia física» para estos días de parón.
Todo lo que sea menester para hacer bueno eso de #Quedateentuputacasa.
Marcos Vilaplana Ribes
15 de marzo, 2020 En 16:27
Me cuesta comprender el comportamiento egoista de estàs personas…llevamos ya muchos días con lo mismo, no paran de repetirlo una y otra vez lo de quedate en casa, aun así se lo pasan todo por el ‘forro’… Se merecen una buena colleja(multa), hace falta mas empàtia y civismo y dejar pensar solo en el benefio propio.