Ciclismo
Vingegaard & Pogacar, vendedores de sensaciones inéditas
El libro en blanco del Tour es un vendaval de experiencias con Vingegaard y Pogacar
Cada día una historia, cada día desarrollo, nudo y desenlace diferentes, cada día escribiendo un renglón sin final previsto, ni siquiera intuido, el Tour, este Tour que nos están regalando Pogacar y Vingegaard, es impagable, no se si el mejor de nuestras vidas, pero cerca de ello, de esa cima tan subjetiva como exigente para quienes nos gusta este deporte y lo seguimos hace tanto tiempo.
Cada etapa es un imposible de igualdad como no recuerdo en mucho tiempo, un día se va cabreado Vingegaard, al siguiente Pogacar, cuando no los dos al mismo tiempo.
Abren gas, están a una eternidad del resto, pero se anulan y reparten juego, entre sus equipos y entre los que les persiguen de cerca, como el propio Carlos Rodríguez.
¿Qué va a pasar?
No tengo idea alguna, pero ni remota, no pongo la mano en el fuego por ninguno.
Si me dejo llevar por la sensación final, sumada a la general misma, vería a Vingegaard con un margen estrecho, pero algo por delante.
Tan estrecho como esos diez segundos que les separan, que no es nada en la vida real, pero que en este Tour es un muro, un chicle que se estira y se estrecha al placer de las piernas de dos ciclistas que, pase lo que pase, han escrito historia gorda de este deporte.
Pero ahora viene la rubrica y el titular, y no se van a dejar nada por intentarlo.
Pogacar ha solado varias veces a Vingegaard, el equipo del primero ha incomodado y roto el guión varias veces al del segundo, pero no le ha sido suficiente para liderar el Tour.
Vingegaard es un muro, una suerte de sparring que encaja golpes para volver otra vez a la rueda del esloveno y así pasa los días de amarillo.
El regalo de ascensión al Joux Plane es la fábula de este Tour, Pogacar unos cinco segundos por delante de Vingegaard durante más de un kilómetro sin que la cuerda se rompa.
Eso yo no lo recuerdo, como el juego de caretas en Saint Gervais, cuando el esloveno le dijo ahí se te va Adam, pero el danés no mordió el anzuelo.
Pueden estar satisfechos de lo que nos están ofreciendo, están sublimando este deporte a la excelencia que nunca le imaginamos, a una sucesión de sensaciones que no es sencilla encontrar en el ciclismo y menos en una vuelta de tres semanas.
Nos ha tocado el gordo con estos dos, al punto que cada vez que hay una caída, que surge un revés en la ruta, cruzamos los dedos para que ninguno de los dos esté en el suelo y nos duele en el alma que gente, buena gente, se quede en el camino.
Porque ambos compiten en otra liga, podríamos decir que como el de la foto, ambos cayeron en la marmita.
Imagen: A.S.O./Charly Lopez
Ciclismo
Que Movistar no vuelva a ser como el de Nairo y Valverde
Movistar debe ser un equipo coral y no centrado en Nairo y Enric Mas
No es la primera vez que en este mal anillado cuaderno hablamos del Movistar de hace no tanto tiempo, el de Nairo y Valverde, como un equipo que acabó como el mejor del mundo varios años, pero sin reparar que los resultados de sus dos mejores ciclistas eclipsaban problemas de base que con el tiempo se han hecho patentes.
El ciclismo son ciclos, es cierto, nos lo dijo Carlos Verona no hace tanto, recordando que el Jumbo, hoy todo podersoso, era un equipo normalito en tiempos del Team Blanco y Belkin.
Y tiene razón, pero no es lo mismo ir de menos a más, como los neerlandeses, a ir empequeñeciendo, como en el caso de los azules.
Ver a Nairo y Valverde saludándose en la concentración del Movistar es un déjà vû que llenó de gloria el palmarés de esos años, pero fue la semilla de los malos tiempos que tuvieron que venir.
El equipo necesita referentes, pero referentes de verdad, asentados en una forma de hacer que es común a muchos equipos, más y menos grandes que ellos y que marca ahora el paso.
Cada año por estas fechas, cuando veo las primeras concentraciones del equipo espero que esta vez síl, las osas cambien, pero de verdad, dando la sensación que es un bloque con los tiempos, que acepta el cambio y se adapta a él, saliendo a disputar todo y siendo competitivo siempre.
Esa es la primera ilusión, luego empieza la temporada y…
Creo sinceramente que Nairo puede darle desahogo al equipo, lo creo que de verdad, no está para ganar una grande -en verdad muy pocos pueden optar a ganarla ahora mismo- pero sí puede ser un seguro desde el inicio para empezar a llenar el palmarés, aunque sea a base de etapas y triunfos que muchos etiquetarían de menores.
En la vida todo suma.
Pero centrarse en Nairo, como en sus años del Movistar del colombian0 y Valverde, igual que hacerlo con Enric Mas, sería repetir el mismo error.
El equipo es y debe ser coral, y tiene buenos ciclistas para lograrlo.
Ya los tenía esos meses en los que la zozobra del descenso les merodeó y empezamos a ver brillar a Serrano, Pedrero y Aranburu.
Hasta Iván García Cortina estrenó su palmarés.
El equipo ha hecho buenas incorporaciones, fichajes que pueden dar rédito inmediato como Formolo o Cavagna, que pueden cambiar el paso del equipo y su actitud de generales, hacia una mayor presencia diaria en la carretera.
Jon Barrenetxea, Carlos Canal y Pelayo Sánchez tienen que crecer desde adelante en las carreras, no engordando el pelotón en sus horas muertas y por favor, libertad para un ciclista como Javier Romo, con tanto motor y calidad como valentía.
Y ya puestos a pedir, que Oier Lazkano tenga todo lo necesario para ver hasta dónde es capaz de llegar en el norte, como nunca se dispuso para trotones como Erviti o Chente.
Creo que Movistar, sin ser el más adinerado, sin fichajes galácticos, sigue teniendo mimbres para cosas buenas y no caer en el error de los tiempos de Nairo y Valverde, eso quedó ya lejos.
Imagen: @Movistar_team
Ciclismo
Moments23 Pogacar ganó a domicilio en Flandes
La victoria de Pogacar en Flandes rozó el éxtasis
Ciclismo
Bora ha tocado techo con Cian Uijtdebroeks
Si Cian Uijtdebroeks quiere estar en Jumbo Visma, el Bora está sentenciado
Ahí está en la foto, es el momento del ataque de Jonas Vingegaard en el Tourmalet, en la pasada Vuelta.
Es Cian Uijtdebroeks y esos días ya demostraba en una grande todas esas habilidades que le han acompañado desde juvenil.
9 de diciembre, sábado y tarde ajetreada en las oficinas del aún Jumbo, el año que viene Visma a causa del futuro de Cian Uijtdebroeks.
¿Dónde correrá el año que viene?
Jumbo anuncia su fichaje, acto seguido Bora lo desmiente y para colmo la agencia que lleva al equipo confirma que su contrato con el Bora expiró hace unos días.
La guerra por el talento más codiciado del pelotón se ha abierto, tensas relaciones entre el mejor equipo del mundo y uno de los que aspira a atraparle.
En esta historia, creo que sólo cabe un final, y será el que quiera el corredor.
Si Cian Uijtdebroeks ha decidido dejar Bora, con quien ya ha tenido sus más.y sus menos durante el año, poco más cabe decir.
Sé que hay cuestiones legales, que se fallará en favor de uno u otro, pero no creo que Bora quiera afrontar la temporada con un ciclista que ha llegado a este extremo en su deseo de dejar el equipo.
Es como correr con uno menos, por mucho que su nombre y apellido prometan tanto.
Es notorio, por eso, suceda lo que suceda, la atracción que Jumbo ha logrado sobre todo el talento que emerge.
Los neerlandeses se han convertido en «the place to be» pasando de ser un equipo como el Blanco o el Belkin, de mitad de la tabla, a ser la referencia absoluta del pelotón.
A mí, personalmente oo me gusta este acaparamiento de calidad, pero los amarillos ahora mismo se llevan todo, incluso, como he leído, sin ser los que mejor pagan en muchos casos.
Imagen: UNIPUBLIC / SPRINT CYCLING AGENCY
Ciclismo
El flaco favor de Jesús Ezkurdia
Jesús Ezkurdia ha puesto la diana en su «querida» Fundación Euskadi
La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha identificado a Jesús Ezkurdia, exmanager del Euskaltel-Euskadi, como el autor del envío a diferentes periodistas, entidades y empresas, documentos extraídos del sumario de la Operación Ilex. En ella se investigaba la supuesta relación del médico extremeño Marcos Maynar, investigado en la operación, con varios ciclistas pertenecientes al equipo Caja Rural. Dicho envío de documentos se produjo en agosto, a pocos días del inicio de la Vuelta a España donde participaba la formación navarra, y la investigación posterior llevó a los miembros de la UCO a estrechar el cerco sobre Ezkurdia, a quien llamaron a declarar en noviembre.
Así empieza la crónica de El Correo sobre la identificación de la persona que envió el famoso dossier que comentábamos hace unas semanas.
Si la historia ya era rocambolesca, que señalen así al remitente de dicho sobre es demoledor.
Y ya no lo es sólo por Jesús Ezkurdia, es por lo que mancha la imagen de un proyecto con treinta años de trayectoria luchando por seguir a flote, como el de la Fundación Euskadi.
Cuando en su día comentamos lo que nos pareció un podcast en el que se entrevistaba a Marcos Maynar, dimos cuenta de la relación de los equipos profesionales españoles y aquella famosa etapa de la Itzulia en la que se anularon entre ellos para que acaba ganando Alaphilippe.
Pues bien, todo lo que trascendió de aquella etapa queda corroborado con la pillada al que fue manager del equipo naranja hasta hace un par de meses más o menos.
El daño que le ha hecho a su equipo es brutal, la sombra de duda sobre el Caja Rural, que ya se verá si es trigo limpio o no, también, pero sobretodo el golpe que le da a su deporte es tristísimo,
Creer que te puedes ganar la plaza en la Vuelta a España en base a hundir a la competencia, aunque en ello vaya un palo al ciclismo. es de ilusos, pues al final estás mordiendo la mano que te da de comer.
A ver ahora qué le sucede a la persona identificada, no le deseo nada malo, pero sí verle lejos del ciclismo.
No me cabe en la cabeza proceder más chapucero y pensar que algo así no te vaya a pasar factura en el futuro.
Y eso que el día que pasó por este podcast nos gustó mucho escucharle la ilusión con la que el Euskaltel volvía a la Vuelta casi diez años después de la última vez.
No imaginé un desenlace así para él.
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