Ciclismo antiguo
El primer gran duelo Indurain-Rominger fue en la Volta
Indurain sumó su tercera Volta en su primer pulso con Rominger
Permitidnos meter cuchara en la historia, con la Volta recién acabada, y recordemos la edición de hace treinta años, cuando la carrera aún se corría en septiembre, pocos días después del mundial, que en aquella ocasión ganara Bugno en el circuito de Benidorm, por cierto nada adecuado para Miguel Indurain.
Y es que, si miramos atrás duelos entre Indurain y Rominger no tuvimos muchos, más bien pocos, especialmente con los dos en su mejor versión, por eso, aprovechamos una efeméride tan redonda, tres décadas, para irnos a la Volta de 1992.
En aquella carrera confluyeron los mejores ciclistas del mundo, incluso el citado campeón del mundo en una foto que guardo celosamente desde entonces en la carretera de Sants.
Aquella carrera se pintó como un Indurain vs Rominger, pero aquella Volta también tuvo otros protagonistas.
Por ejemplo, aquel miope suizo que fuera líder un día en el Tour, que iba como un tiro en las cronos.
Alex Zulle se visitó el primer maillot verde y blanco de la UE Sants tras una crono por equipos partida en dos, eso es, cada conjunto salía en diferentes momentos, partido en dos bloques.
Zulle estuvo acompañado por Joan Llaneras, Melcior Mauri y Johan Bruyneel, os podéis imaginar el resultado.
A pesar del resultado del equipo A del ONCE, tanto Rominger como Indurain mantuvieron las opciones intactas.
Opciones que siguieron vigentes tras la crono de Igualada, en la que Zulle lograba ganar a Indurain, por cinco segundos, sólo, pero suficiente, para poner un puntito negro en la increíble racha de cronos que consiguió amasar el mismo ciclista que dos meses antes había volado en Luxemburgo.
Ese suizo llamado Zulle estaba picando a la puerta de los grandes, su 56×12 acabó incluso con la resistencia del dos veces ganador de la Volta y Tour aquellos días.
Pero Indurain no dejó las cosas como estaban.
En la etapa de Vallter 2000, el navarro salió a defender su dorsal uno, había ganado el año anterior, y firmó una cabalgada monte arriba con Tony Rominger que sería la imagen más repetida en el siguiente Tour.
En esa Volta, un compañero de Indurain, Jeff Bernard iba como un tiro, de hecho había sido la amenaza de Banesto al poder de Zulle, hasta que la subida a Vallter lo puso todo en su sitio.
Indurain atacó desde abajo y sólo le siguió Rominger junto a Martín Farfán y el otro gran protagonista de esa Volta, Antonio Martín Velasco, la efímera y llorada figura emergente del Amaya.
Rominger ganó la etapa, pero Indurain recuperó el cetro de la Volta, la que sería su tercera Volta, las mismas que tiene Alejandro Valverde, lejos de las de otro navarro, Mariano Cañardo, aunque todos figurando en el libro de oro de la tercera vuelta por etapas más antigua del mundo.
Imagen: Volta Catalunya