Ciclismo antiguo
#PodcastJS Indurain también ganaba Tours en la primera semana
La primera semana del Tour era una de las especialidades de Indurain
A la vista de las brutales escabechinas que estamos viviendo en la primera semana del Tour, queríamos saber un poco qué ha cambiado tanto en el ciclismo para que el peligro se haya vuelto tan insoportable, por ejemplo, respecto a ediciones como las que ganó Miguel Indurain.
Siempre se dijo, como nos cuenta nuestro invitado, Carlos Tigero, autor del libro «La estela de Miguel«, que Miguel Indurain ganaba el Tour en las cronos y defendía la renta en la montaña, pero nada más lejos de la realidad, el navarro asentaba sus credenciales en una primera semana inmaculada, siempre delante y atento, gestionando un stress insoportable y sacando partido a una condición física brutal.
En este ciclismo, llegar íntegro a la parte decisiva del Tour es casi un milagro, una obra que Indurain logró culminar cinco veces, aunque como nos comenta Carlos Tigero, el ciclismo ha cambiado algunas cosas desde entonces.
Si echamos una mirada atrás, vemos que Miguel Indurain sorteó cinco años consecutivos una primera semana de Tour muy complicada.
Omitiendo el primer Tour, 1991, pues no iba de gran líder, Indurain tuvo una primera semana muy complicada en 1992, dando aquel rodeo por el norte de Europa, sorteando la lluvia y ataques de rivales tan directos como Roche, Chiapucci y Lemond.
Al año siguiente, la primera semana del Tour de 1993, el tercero de Indurain, dejó grandes perjudicados como Tony Rominger o Alex Zulle y abandonos como el de Abraham Olano, además de una etapa corrida en velocidad récord, la que gana Bruyneel.
En 1994, el Tour empezó con la espantosa caída de Armentières y la imagen de Laurent Jalabert sangrando muchísimo, Indurain iba justo detrás de los accidentados, pero salvó casi de milagro.
En el último Tour de Indurain, la carrera arrancó de la Bretaña y con lluvia…
Aunque el navarro cumpliera con creces esos días, la realidad presente es más compleja que entonces: más velocistas, más presión, carreteras que dan para lo que dan… en fin, que esperamos el momento que la carretera y no el azar de la montonera empiece a repartir suerte entre los grandes nombres.